viernes, 20 de diciembre de 2013

Pestiños jerezanos



Con esta receta de pestiños ya podemos decir que estamos preparados para celebrar la primera Navidad de Una física en la cocina. Los pestiños de esta receta están hechos al estilo jerezano: son pestiños pequeñitos bañados en miel y hechos con vino de Jerez, que le da un sabor muy especial a los pestiños.

Debo confesaros que, además, éstos han sido mis primeros pestiños. La receta me la ha pasado la madre de mi amiga Gina, y se la pedí a ella precisamente porque los suyos son unos de los pestiños más finos y deliciosos que he probado. Gracias a sus detalladas explicaciones puedo compartir ahora esta maravillosa receta con vosotros, ¡muchas gracias, Gina (madre e hija)!

                                      

Ingredientes

Para la masa de pestiños:

  • Entre 750 y 800 g de harina (500 g de harina de fuerza y el resto de harina de trigo)
  • 200 g de aceite de oliva virgen extra
  • 30 g de ajonjolí
  • 30 g de anís en grano/matalauva
  • 100 g de vino fino u oloroso (a gusto de cada cual)
  • 100 g de zumo de naranja
  • 50 g de licor de anís
  • Una pizca de sal
  • La cáscara de un limón
  • La cáscara de una naranja
  • 1 huevo
  • 1 cucharada sopera de canela
  • 4 cucharadas soperas de azúcar

Para el enmelado:

  • 500 g de miel
  • 100 g de agua
  • Un chorreoncito de vino oloroso
Ponemos a calentar los 200 g de aceite y freímos en él la cáscara del limón y de la naranja hasta que queden bien doraditas (un poco quemaditas). Apagamos el fuego, retiramos las cáscaras y echamos en el aceite caliente el ajonjolí y la matalauva y dejamos que se refrían un poco. Cuando el aceite se enfríe, lo colamos y lo mezclamos con el resto de ingredientes, dejando la harina para el final. Si queremos, podemos poner en la masa una cucharadita del ajonjolí frito que nos ha sobrado al colar el aceite. Después, añadimos la harina poco a poco mientras vamos batiendo la masa. Si tenéis Termomix, podéis mezclar toda la masa con ella. Si no, comienza batiendo con las varillas o con la batidora y después continúa amasando con las manos. Echamos harina hasta que la masa no admita más (costará mezclarla y se dejará de pegar a las manos). Una vez bien amasada, se deja reposar durante media horita.


Vamos haciendo pequeñas bolitas con la masa. Las extendemos con un rodillo y les damos la forma de pestiños. A mí me gusta que queden pequeñitos y finitos, de esta manera quedan bocaditos mucho más agradables. (Y te puedes comer más ;-).


A la vez vamos friendo tandas de pestiños, de forma que queden morenitos. Si alguien nos puede ayudar a hacer este paso, será más entretenido y más rápido.

 

Una vez fritos, los pestiños se enmelan. Para ello, ponemos la miel con el agua en un cazo. Yo le añadí a la receta un chorreoncito de vino oloroso, creo que le da un buen puntito, pero eso es al gusto de cada uno. Calentamos y cuando la miel empieze a hervir echamos los pestiños. Los removemos con una espumadera para que se empapen por todos lados. Esperamos a que vuelva a salir espuma y vamos sacando y enmelando más pestiños. 


Por mucho que te tienten, deja que se enfríen un poco o te quedarás sin dedos. Con estos pestiños y una copita de anís te aseguro que tendrás las Navidades más dulces.





5 comentarios:

  1. Fantástica receta. Me la apunto para hacerla. Que ricos te han quedado!

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  2. Halaaaa, qué pinta!! Nunca he probado los pestiños, manda alguno! ;)

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  3. Hola!, no hemos hecho nunca pestiños, siempre con la sensación de que deben ser bombas calóricas no nos animamos. Pero ese puntito de vino de Jerez... tienta.
    Saludos
    Marisa

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  4. Pues a todos los que no los habéis probado, os animo de verdad a que los probéis. Además si os ponéis a buscar, veréis que hay mil variantes de la receta.

    En cuanto a lo de "bombas calóricas" que comenta Marisa, os comprendo. Pero tengo que aclarar que aunque, efectivamente, son todo harina y están fritos en aceite, no llevan ningún ingrediente que sea fuente de colesterol o de grasas saturados. O sea, que son calóricos, pero tampoco son muy insanos. Por eso a mí también me gustan pequeñitos, para tomar sólo unos poquitos con alguna copita o con el café. Y por eso también se toman en Navidad, porque como pasa con el turrón o con los polvorones, son las fechas cuando estas cosas están permitidas.

    Me alegro de que os haya gustado la receta. Un beso!

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  5. Que ricos están estos pestiños, con el vino de esta tierra en Navidades nunca faltan en casa, que maravilla!!

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